
Finalmente podemos respirar tranquilos. Tara Conner, elegida Miss Estados Unidos, finalmente no será defenestrada, condenada ni apedreada a causa de su comportamiento “impropio” para una joven galardonada como ella. A esta rubia se le acusa de haber cambiado de novio al menos 3 veces en el último año (de puta), de salir demasiado de fiesta en Nueva York (de golfa) y de beber bastante alcohol (borracha) pese a que le falte un año para llegar a los 21 mínimos para poder disfrutar de tan satánico vicio.
Sin embargo, quien tiene la potestad de emitir la sentencia es el mega ultra hiper magnate Donald Trump, porque no piensen que este certamen no es privado. El amo y señor con nombre de pato se divorció de su anterior esposa tras ser descubierto su romance con Miss Georgia. Él popularizó en TV la frase “You’re fired” (estás despedido) en, El aprendiz, un patético reality show que él mismo conducía.
¡Viva Tara Conner, y las rubias golfas como ella que van ligeras de ropa! ¡Muerte a Mr. Duck y a todos los altos ejecutivos aburridos, egocéntricos y orgullosos que van de traje y corbata!
Claro que para dar el ejemplo, para que los niños imiten el comportamiento intachable mientras sus padres se hinchan a cervezas, espían a sus vecinas y van a misa, no sirve...