lunes, marzo 05, 2007

4 Zonas 4


En los procesos de exclusión social intervienen variables personales (las minusvalías, enfermedades, etc.) tanto como otras propias de nuestra interrelación con los demás (emigración, ruptura con el entorno familiar, etc.).

Sin embargo, el tema es más complicado de lo que parece. Cuando nació la sociedad industrial, o incluso antes, la clasificación de “pobreza” y “desigualdad” bastaban. Hasta que llegaron los sociólogos…

Con su bendita manía de complicarlo todo, se preguntaron si era lo mismo estar en el paro un mes, dos años o cuarenta, y llegaron a la conclusión que no. También acordaron que no es una cuestión de be or not to be, de ser o no ser, sino que la exclusión social se puede dividir en varios niveles, diferentes grados pertenencia a la sociedad, de sentirnos protegidos por su entramado.

Un sociólogo que no conozco, llamado José Adelantado, propuso dividir a la sociedad en cuatro zonas, según su grado de integración social. En un primer escalón ubicó a la Zona de integración (ciudadanos en extinción, que gozan de trabajo y familia estable), en segundo a la Zona de vulnerabilidad (la inestabilidad es moneda corriente), tercera a la Zona de asistencia (pobres afortunados de vivir del paro y pensiones) y finalmente, la Zona de exclusión, el último orejón del tarro, sin ninguna posibilidad remota de integrarse laboralmente ni reconciliarse con la sociedad que les da la espalda.

3 comentarios:

Leicca dijo...

Esa división por zonas me suena algo así como a "land-art". :-(

No sè.

Un besillo.
Hoy tengo algo màs de tiempo por aquí.

Ana Durá Gómez dijo...

Uff, menudo tablero de ajedrez con tanta zona, pero al menos ya entiendo el origen de ese cacao, y ya era hora, porque trabajo en un periódico de inmigrantes... y esas cosas hay que tenerlas cristalinas.

Cronopio Urbano dijo...

Valoro tu sonceridad Leicca, y les cuento que todo esto formaba parte de un trabajo práctico de una asignatura llamada "Estructura social", que bien podría llamarse Sociología.
Reconozco que tienen algo de amarillismo un poco repugnante, pero no pude evitarlo. Creo que es difícil no caer en eso cuando se tratan estos temas.
En fin, si he logrado aclarar algo, o te ha servido de algo, Lynn, bienvenido sea.